OJOS DE LUNA

​He visto tus ojos de tantas maneras. Se me asemejan a la luna y sus fases. He visto ojos de luna llena enormes y brillantes, que se apoderan del firmamento de tu rostro apacible. También he visto ojos de menguante, que se apagan lentamente y liberan el corazón de todo mal, de todo pesar. Luego, están los ojos de luna nueva, aquellos que se esconden tras parpados sumidos por el cansancio, el deber o unas mejillas sonrojadas victimas de un halago. Ah, pero si hay una fase mágica y peligrosa, es la de ojos crecientes. Aquellos que abren su luz desde la oscuridad y dejan salir todo su potencial, su belleza, su maldad, su bondad. Si hay un evento aterrador, emocionante y magnifico, ese sin duda es cuando tus parpados se elevan y dan paso a esos ojos encantadores, ojos de luna.